Autor: Dra. Ibone Olza

Ante la creciente epidemia de inne-cesáreas

La progresiva medicalización del nacimiento se ha traducido en un considerable incremento de las tasas de cesáreas.

La cesárea es cirugía mayor abdominal: tiene un riesgo de mortalidad materna 6 veces superior al parto vaginal (1)

En nuestra sociedad se tiende a minimizar la posible repercusión psicológica del nacimiento por cesárea en la madre. El propio término "cesárea" favorece la trivialización de la cirugía: "hacer una cesárea" suena mucho menos dramático que decir "le han tenido que operar para sacar al bebé" o "ha tenido que pasar por una cirugía mayor abdominal para dar a luz".

La tasa de cesáreas en nuestro país se situa en torno al 23%, muy por encima del 10-15% que recomienda la Organización Mundial de la Salud, con lo que se está poniendo en grave peligro la vida de madres y niños. Según la OMS más de la mitad de las cesáreas realizadas en nuestro país son innecesarias.

Existe una gran disparidad en las tasas de cesáreas entre las distintas autonomías. (Navarra 2003:14,6%, País Vasco 2003: 17,1%, Castilla y León 2004 25,1%: Segovia: 35,3%) (2) Tabla año 2000 (tabla 1))

Provocar el parto favorece que este termine en cesárea. Pensamos que está habiendo un aumento de las inducciones sin que haya un motivo médico que lo justifique y que esto aumenta el número de cesáreas.

Sería positivo que se hicieran públicas las tasas de cesáreas de todos los centros sanitarios de nuestro país, sean privados o públicos, y que dicha información se facilitara a todas las embarazadas.

Cuando son necesarias las cesáreas salvan vidas de madres y niños y los beneficios superan los riesgos de la intervención. Cuando la cesárea es innecesaria, los riesgos para la madre y el niño son evitables y muy costosos.

En la mayoría de los casos el intentar el parto vaginal despues de cesárea es la opción más segura para madres y niños. Tres de cada cuatro madres pueden parir vaginalmente despues de una cesárea. Numerosos artículos médicos señalan la conveniencia de intentar el parto vaginal incluso despues de dos o tres cesáreas (3 y 4).

El foro APOYOCESAREAS se creó en el 2001 con la intención de ofrecer apoyo psicológico a madres que habían tenido una o más cesareas. A lo largo de los últimos cuatro años se han recibido más de 18000 mensajes y en la actualidad cuenta con 500 suscriptores.

La experiencia del foro nos muestra que las cesáreas generan un gran sufrimiento emocional.

En muchos de los testimonios recogidos a la experiencia de la cesárea se sumó una situación de pésima atención hacia la mujer por parte de los profesionales sanitarios que le atendían. Pensamos que muchos profesionales tambien padecen las consecuencias de la excesiva medicalización del nacimiento, como son la sobrecarga de trabajo y el aumento de las demandas que a su vez favorece la práctica de una medicina defensiva que no beneficia a ninguna de las partes implicadas.

Diversas investigaciones han demostrado que cuando el parto es atendido por matronas independientes disminuyen las tasas de cesáreas.

Para minimizar el sufrimiento de las mujeres que necesitan una cesárea se debería facilitar el acceso del padre u otro acompañante al quirófano durante la intervención, como es práctica habitual en otros paises europeos (5).

No está justificada la separación sistemática de madres e hijos tras la cesárea. Si la madre no puede estar con su hijo esté debe permanecer con su padre u otro familiar. Hay madres que tras la cesárea han tardado más de 24 horas en saber si su recién nacido estaba vivo. Esto produce un alto sufrimiento emocional. Pedimos que estas situaciones dejen de producirse en los hospitales españoles.

La Organización Mundial de la Salud recomienda la aplicación del método canguro a todos los recién nacidos prematuros. Por desgracia este método sólo se aplica en menos de la mitad de las UCIS de neonatología españolas, lo que empeora el pronóstico de los prematuros y dificulta enormemente el vínculo, la lactancia, y la recuperación psicológica de las madres que han tenido un parto traumático.

La lactancia materna es un instrumento terapéutico de gran ayuda en la recuperación de la cesárea, las madres que han tenido una cesárea requieren un mayor apoyo emocional que les facilite el éxito en la lactancia. Lamentablemente tan sólo el 2% de los hospitales españoles son Amigos de los Niños (10 en total) frente al 100% de los hospitales suecos (6).

Se puede iniciar la lactancia materna en la hora siguiente a la cesárea en la inmensa mayoría de los casos. No se debería administrar ningun biberón al recién nacido sin el consentimiento informado de su madre. La administración de biberones de suero o leche en las primeras horas de vida entorpece seriamente la lactancia materna.

Hacemos pública nuestra preocupación ante el alarmante aumento de las cesáreas en nuestro país y pedimos que las autoridades competentes tomen medidas para invertir dicha tendencia y evitar todas las "innecesareas".

Consideramos necesario que desde la sanidad pública se ofrezca ayuda psicológica para las madres y familias que han tenido un parto traumático, que permita minimizar las secuelas de dicho trauma (7).

Dra. Ibone Olza
Médico-Psiquiatra
Co-autora de "Nacer por cesárea". Ed. Granica